Este sábado, 22 de junio, el Servicio de Archivos de la Comarca ofreció una visita comentada a la exposición que pudo verse en Piracés, con motivo de la reciente organización de su Archivo Municipal por este servicio.
La muestra se estructuró en torno a cinco grupos temáticos, que permitieron descubrir a las personas que la visitaron algunas curiosidades sobre los antiguos moradores de Piracés y sobre su historia reciente en general. Estas secciones fueron: Los movimientos de población; Las celebraciones, fiestas y romerías; El agua corriente y la luz; Los gastos e ingresos municipales, y El aceite y el vino.
Se pudieron ver documentos originales conservados en su archivo municipal, así como algunas reproducciones de documentos conservados en el Archivo Histórico Provincial de Huesca y en el de la Diputación de Huesca.
La exposición se acompañó de algunas fotografías conservadas en la Fototeca de la DPH, como las relativas a la romería de la Virgen de la Corona que realizó Fernando Biarge en la década de 1970, o las tomadas por Ricardo Compairé en el primer tercio del s. XX en el desaparecido molino de aceite, del que todavía se conservan en el pueblo algunas de sus antiguas vigas y piedras. Se completó con fotografías que aportaron algunos vecinos pertenecientes a sus álbumes familiares.
También se expusieron objetos utilizados antiguamente por el Ayuntamiento, relacionados todos ellos con los documentos expuestos, como un tallador de madera con el que medían a los mozos que eran llamados a cumplir el servicio militar obligatorio; una preciosa y antigua máquina de escribir Hispano Olivetti de los años 50; una urna de cristal que se utilizaba antiguamente en las votaciones, así como sellos municipales y pequeños útiles de escritorio.
De esta manera se contextualizó y explicó el contenido de alguno de los documentos expuestos, como los expedientes de alumnos que salieron a estudiar fuera de Piracés en el s XIX; los expedientes de reclutamiento de 1887, que incluían datos detallados de los reconocimientos médicos de los mozos de cada quinta; los padrones de población de la década de 1930, que expresaban de dónde eran naturales sus habitantes; los libros de actas del pleno, que recogían las decisiones más importantes del Ayuntamiento; los proyectos de abastecimiento de agua y de autorización de instalación de líneas eléctricas, que trajeron paulatinamente la electricidad y agua corriente a la población desde 1934; las antiguas matrículas fiscales, que registraban los negocios como la carnicería, el café o la herrería que había en Piracés en 1946; los libros registro
de matrículas de 1959, que listaban los dueños de vehículos de tracción animal y dueños de bicicletas que había en el pueblo (que estaban obligados a matricularlas); las facturas por pasteles especiales que emitió una antigua confitería de Piracés con motivo de la visita del gobernador civil en 1956; o las fichas con declaraciones de cosechas y existencias de vino, con los nombres y el número de litros (entre 50 y 200 por casa) que tenían los vecinos de Piracés en el año 1955.
Para finalizar, José Antonio Adell y Celedonio García ofrecieron una charla con una selección de noticias aparecidas en prensa histórica sobre Piracés, y curiosidades e historias recopiladas en pueblos de la Hoya y el Somontano de Huesca.