Cincuenta y siete talleres se han impartido en pequeñas localidades de la Hoya durante la edición del programa de Consumo Comarcal Consciente durante el año 2019.
El programa “CO3. Consumo Comarcal Consciente” que el Área de Medio Ambiente de la Comarca Hoya de Huesca|Plana de Uesca llega a su conclusión esta semana. El programa se inició hace tres años con la intención de sensibilizar a los ciudadanos sobre las consecuencias ambientales y sociales de los hábitos de consumo.
En la edición 2019, el programa se ha estructurado en dos bloques: uno que centra el interés sobre los residuos plásticos y electrónicos que generamos y otro que se basa en los alimentos de la huerta, tanto en los métodos para que su producción sea más ecológica como en su transformación en conservas sostenibles. La ejecución del proyecto se ha conformado, finalmente, con cuatro talleres participativos que han pretendido ampliar los conocimientos de las consecuencias ambientales de la fabricación de los productos que consumimos diariamente así como de su destino en cuanto dejamos de utilizarlos y se convierten en residuos.
Conocer los diferentes tipos de plásticos con los que convivimos, su problemática en la gestión, así como la resolución de dudas sobre el destino de cada tipo y sus posibilidades de reciclaje ha sido la dinámica del taller denominado “Compuestos plásticos: ¿ángeles o demonios?”.
Con el nombre de “Componentes electrónicos: el lado oscuro de la tecnología” se ha dado a conocer el potencial contaminante de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, no sólo una vez que ya no se utilizan sino también en cuanto a los costes sociales y ambientales de los procesos de producción.
Por su parte la actividad “Conservar la huerta” ha aportado un conjunto de observaciones, procedimientos y decisiones para la conservación del ecosistema del huerto familiar.
Y como extensión de este último, se ha impartido el taller “Cosecha y conserva” que implica la recopilación de las recetas de los procesos de conservación de alimentos que tradicionalmente se vienen aplicando en las distintas localidades, a la vez que se aporta información científica sobre los procesos físicos y químicos que permiten poder disfrutar de productos de la huerta durante todo el año.
Desde el mes de mayo y hasta diciembre se han realizado por todo el territorio de la Comarca hasta un total de cincuenta y siete talleres, por lo general en pueblos de escasa población, con la participación directa de los vecinos y mediante la colaboración de ayuntamientos y asociaciones.